El destacado intelectual argentino Ernesto Schoo falleció esta mañana a los 87 años. Se encontraba internado en el Cemic y había sufrido un ACV en las últimas semanas. Fue un ilustre crítico de cine y teatro y trabajaba como columnista de Espectáculos en LA NACION desde 1997.
Desde el entorno familiar informaron que sus restos serán velados hoy en su casa de Palermo. Schoo había sido internado a raíz de una quebradura de cadera y, desde entonces, su salud había desmejorado.
Schoo, quien también era miembro emérito de la Academia Nacional de Periodismo, nació en Buenos Aires el 12 de octubre 1925.
TRAYECTORIA
Se inició en 1950 en La Gaceta de Tucumán, Vea y lea y la Revista Sur. Igualmente, ejerció el periodismo en diarios y revistas como Primera Plana, La Opinión, Convicción, Tiempo Argentino, Noticias, etc. Como jefe de la sección de arte en Primera Plana realizó la primera entrevista que se publicó en un medio argentino a Gabriel García Márquez.
Fue guionista de la película De la misteriosa Buenos Aires basada en el libro homónimo de Manuel Mujica Láinez de Oscar Barney Finn en 1981. También de Manuel Mujica Láinez adaptó para televisión los relatos El dominó amarillo y El coleccionista.
Fue columnista de arte y espectáculos en los programas de televisión Desayuno, América en vivo, entre otros, y conductor, durante cuatro años, de Las Musas, un ciclo de cable junto a su colega Jorge Luis Montiel, donde se dieron cita los más renombrados exponentes de la cultura nacional e internacional como Horacio Coppola, Amelia Bence, Alejandra Boero, Guillermo Roux, Leonie Rysanek, José van Dam, María Rosa Gallo, Hildegard Behrens, Inda Ledesma, etc. Todas esas entrevistas forman parte del acervo documental que puede consultarse en el Centro de Documentación de Teatro y Danza del Teatro San Martín, donde se encuentran en proceso de digitalización para su consulta.
Ha traducido obras de Henry James, Franz Kafka y del recientemente fallecido autor argentino Héctor Bianciotti.
Como escritor publicó una colección de cuentos, Coche negro, caballos blancos en 1989 que ganó el Primer Premio en el género cuentos de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, además de varias novelas: Función de Gala (1976), El baile de los guerreros (1979), El placer desbocado (1988, Premio del Club de los XIII a la mejor novela del año), Ciudad sin noche (1991) y Pasiones recobradas (1997). Además publicó Cuadernos de la sombra, sus memorias de infancia en 2001.
Su novela El baile de los guerreros fue editada en Francia (ALEÏ, Dijon, 1987) como Le Bal des Guerriers, traducida por Catherine Boivin.
Entre 1996-98 fue vocal del Fondo Nacional de las Artes y director general del Teatro General San Martín de Buenos Aires donde se estrenaron, por primera vez en un ámbito oficial, obras de Daulte y Tantanian; regresaron a dirigir en el país Jorge Lavelli, Alfredo Arias y Daniel Suárez Marzal, debutaron los directores Alberto Félix Alberto y Alejandro Ullúa y la joven actriz Mía Maestro (actualmente radicada en Hollywood) así como se realizó la primera edición de Ciclo de Conciertos de Música Contemporánea que sigue vigente hasta el presente.
Fue académico de la Academia Nacional de Periodismo Argentino y miembro honorario de la Asociación de Cronistas Cinematográficos de la Argentina.
En los últimos años fue colaborador y crítico teatral del diario LA NACION, donde sus habituales columnas de los días sábados reflejaban semanalmente la actividad de Buenos Aires y del mundo.
PREMIOS Y DISTINCIONES
- Ganó la beca Guggenheim.
- Premio Cóndor de Plata a la trayectoria
- Premio Konex 1987 en la categoría Comunicación y Periodismo
- Premio Konex de Platino en la categoría "Memorias y Testimonios" (2004)
- Caballero de la Orden de las Artes y las Letras, condecoración entregada por el gobierno francés
- Oficial de la Orden al Mérito de la República de Italia
- Personalidad Destacada de la Cultura por la Legislatura CABA (2012)
MURIO ERNESTO SHOO
Lamentable. Fue un estupendo compañero de
]redacción en Panorama y en La Opinión.
Hombre sensible, sincero, humilde, un crítico
de arte excepcional. Representante de una
generación, de un estilo de periodista sobrio y
talentoso que ya parece no existir más.
Tenía 87 años. Su declive comenzó con una
fractura de cadera y luego fue golpeado por un
ACV. Lo respeté, con un gran y especial afecto.
Tenía otra virtud : fineza, don de la oportunidad.
Se parecía en esos atributos a los intelectuales
centroeuropeos
Daniel Muchnik en facebook-
LA NACION
marlaw85
Una lamentable y sensible pérdida, que muchos de nosotros habremos de sentir aún mas con el transcurso del tiempo, ha sido el fallecimiento de Ernesto Schoo. Una persona poseedora de un extenso bagage intelectual, y de un rico anecdotario hecho que sin duda alguna aumenta esa sensación de pèrdida, y el saber que ya no contaremos con la sapiencia de este periodista para que nos deleite con la lectura de sus notas. Como suele acontecer en estos casos será una ardua taréa encontrar una figura de su valia que pueda llegar a reemplazarlo en la consideración del público lector.Acompaño en el dolor por esta pèrdida a todos su familiares y a todos sus íntimos amigos. QPD
Amigos de estos foros..nos deja un verdadero intelectual..un señor, en la más lata acepción del término..! He tenido el placer de seguir. sábado a sábado, durante años..sus excelentes notas sobre arte..su críticas literarias, teatrales..en fin, el amplísimo espectro que se vasta cultura le permitía abarcar..! Digo..a corazón abierto, que el mundo de la cultura pierde a uno de sus más conspícuos representantas..! Gran señor..eso se traslucía en lo atildado de sus escritos..de cuidada estructura y gentil decir! Estimado "amigo" Schoo (séame permitido el trato..ya que eso era..un amigo en el gusto por lo excelente!..) en mi "idioma" religioso, yo te rezo un muy sentido Padrenuestro..y me persigno..en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo..¡Amén!
adrios
Extrañamente, nadie ha recordado que a principios de los años sesenta, Ernesto y Tomás Eloy Martínez eran los responsables de la página de cine de La Nación. Desinteligencias con la dirección comercial de este diario, que deseaba complacer a sus anunciantes en el muy rendidor rubro "cine", provocaron su alejamiento, algo muy sentido por los lectores de La Nación. Pese a ello, fue un gesto de mutua grandeza el que, muchos después, y siendo ambos periodistas figuras muy destacadas del ámbito cultural, volvieran a estas páginas. Tomás se fue hace un par de años, y ahora ha sido el momento de Ernesto. Quienes de su generación vamos quedando, los despedimos, muy sencillamente, con un "Hasta pronto..!
JuanManuelTG
Una pena enorme que alguien tan talentoso y tan sabio se haya ido, pero vivió una larga vida. Sería muy bueno que editaran las notas que escribió sobre teatro los días sábados. Polémicas, pero muy interesantes.
deshollinador
A Ernesto Schoo no se lo puede comparar con Feinmann o Forster. El primero era un caballero culto, refinado, inteligente y perspicaz. En un reportaje hecho en este diario, definió con suma precisión al populismo, tildándolo como "tumor maligno de la democracia." Los otros dos, son meros charlatanes de café al servicio de un relato fascista, con aspecto desprolijo que indica una enemistad manifiesta hacia el jabón y el peine.
ShakespeareArg
La Fundación Shakespeare Argentina (FSA) lamenta profundamente la muerte de este gran señor de la cultura argentina. Sus maravillosas anécdotas, comentarios y críticas sobre Shakespeare han sido y serán fuente de inspiración para los amantes de la cultura y del poeta inglés.
aethelred
No le hacia falta esconderse, cuando de dar buena formación se trataba. Muchas veces me vi desconcertado al leer sus columnas: parecían largas citas de otras enciclopedias o libros que él traía a cuento. Ahí me percaté de su grandeza, ¿Para qué plagiar lo que otro dijo mejor? No lo necesitaba, porque él sabía dónde se encontraban esas perlas de la cultura. Y nos las hacía llegar. Adiós maestro, ¿Quién, ahora, será capaz de esa generosidad? QEPD
LisMorena
Todos somos parte de un ciclo natural que alguna vez se tiene que cerrar. Cuando muere una figura tan relevante de la cultura, parece que nos resistimos a asumir que el fin del ciclo es también para los seres talentosos. La ilustre trayectoria de Schoo, no ha sido ni será estéril. Nos seguiremos nutriendo de todo lo que aprendimos de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario